Después de seis temporadas y casi 200 goles, Luis Suárez se despidió de Barcelona y de su amigo Lionel Messi, con quien formó una delantera implacable y conquistó una infinidad de títulos con la camiseta blaugrana.
Tras fuertes rumores sobre un posible fichaje por el Real Madrid, el artillero uruguayo, finalmente, llegó al conjunto culé en 2014 y envuelto en polémicas tras la mordida en la espalda al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil 2014. Gran parte de los hinchas no avalaba su contratación, más allá de haber demostrado toda su clase con Liverpool y la Celeste, pero él quiso demostrar que estaba a la altura.
Debió cumplir cuatro meses de suspensión por aquel hecho antideportivo y recién pudo debutar en el Camp Nou el 18 de agosto, en el Trofeo Joan Gamper, frente al León. Arrancó con la pólvora mojada, pero, a medida que se fue conectando con el rosarino, empezaron a llover los goles.
Se entendieron rápidamente y rápidamente se hicieron grandes amigos. Adentro y afuera de la cancha. Asimismo, con la llegada de Neymar forjaron de la mano de Luis Enrique un tridente ofensivo imparable para cualquier defensa. Se cansaron de romper redes y alzar títulos: Champions League, Copas del Rey, Supercopas, Ligas y la lista sigue. En la cima de Europa.
Luego del adiós del brasileño, los rioplatenses siguieron un par de años más haciendo de las suyas. Messi se cansó hasta el hartazgo de asistirlo y lo mismo sucedió con Suárez, quien dejó de lado su faceta goleadora para habilitar, de vez en cuando al argentino.
En el último año, el elenco blaugrana no tuvo su mejor actuación, ni en el torneo local ni en el certamen continental. Eso ocasionó la destitución de Quique Setién y el arribo de Ronald Koeman, quien le expresó que no lo iba a tener en consideración.
Un golpe duro para el tercer máximo goleador de la historia de la institución, que dejó sus 198 goles, sus gritos frente al Merengue, sus 13 títulos y su sacrificio incansable para marcharse al Atlético de Madrid de Diego Simeone. “Te merecías que te despidan como lo que sos: uno de los jugadores más importantes de la historia del club, consiguiendo cosas importantes tanto en lo grupal como individualmente”, escribió Messi. Y cerró: “Hasta pronto, amigo”.
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