Riqui Puig no tiene intención de dejar Barcelona, según comunicó su padre y representante, Carlos Puig, a los responsables del Área Deportiva.
El centrocampista es partidario de trabajar para ganarse la confianza del entrenador Ronald Koeman pese a la competencia que hay en el equipo y en su posición.
El técnico neerlandés dejó al futbolista fuera de la convocatoria para el Gamper y le sugirió que aceptase una cesión que le garantizase minutos, ya que en Barça y en su puesto la competencia va a ser muy alta.
Koeman ve en Puig una opción de futuro, pero no puede garantizarle que juegue mucho esta temporada.
Ante este panorama, la reacción del jugador, muy tocado anímicamente los primeros días, fue comunicar al club que no desea irse. Su sueño es triunfar en el equipo culé y cree que estará más cerca de cumplirlo si se queda entrenando a las órdenes de Koeman y peleando por ganarse su confianza.
Koeman es consciente de que el cambio de sistema que implementó perjudica a Puig. Para el medio centro están Sergio Busquets, Frenkie De Jong y Miralem Pjanic, con Carles Aleñá a la expectativa, pero por delante en la jerarquía.
En el equipo y en su puesto hay mucha competencia con la que Puig, por el momento, quiere pelear.