Diego Churín dijo este viernes que deja Cerro Porteño con el orgullo de haber vestido durante tres años la casaca que ahora cambiará por la del brasileño Gremio, con el que firmará contrato en breve tras el acuerdo logrado entre las partes.
"Fueron tres años y algo más maravillosos, donde fui muy feliz, donde encontré una pasión que no había visto en ningún lado. Me entregué cien por cien al club, estoy muy orgulloso de haber vestido esta camiseta", afirmó el delantero argentino de 30 años.
El atacante dio las gracias a todo el cuerpo de directivos y entrenadores, al plantel y la hinchada del Ciclón, al que llegó en 2017 procedente del fútbol chileno, donde se desempeñó en diferentes equipos desde 2013.
"Tenía muchas expectativas, sabía que venía a un grande, sabía toda la responsabilidad que conllevaba jugar en un grande, ser protagonista en cada torneo que logré jugar", señaló quien motivó por su salida una serie de lamentos y muestras de cariño entre los hinchas de Cerro Porteño a través de las redes sociales.
Sobre su ida a Gremio, Churín indicó que "lo único que quiero es elevar mi techo, desde lo profesional y futbolístico", si bien reiteró que con su marcha del club asunceño deja "muchas cosas en el camino". Además, resumió: "Ir es un paso adelante en mi carrera".
El delantero se despidió ayer jueves de sus compañeros y del técnico, Francisco Arce, quien buscaría el reemplazo de Churín en el juvenil Sergio Bareiro, que milita en el paraguayo General Díaz, prestado por el mexicano Necaxa.
La salida de Churín se produce al poco de comenzar el torneo Clausura, con Cerro Porteño ya colocado en posiciones de cabeza con la pretensión de hacer doblete en la temporada 2020.