Que Passarella no arruine la fiesta de River
Que toda esa energía maligna que genera este personaje no invada y contamine una escena que debiera ser un recuerdo feliz para toda la vida.
No podemos dejar que Daniel Passarella nos arruine lo que debería ser una fiesta. River presenta el estadio más importante de Sudamérica, es el debut de Martín Demichelis en casa, es el primer partido también con nuestra gente en la vida post Muñeco que tenemos que aprender a vivir... Son todos hechos demasiado relevantes como para dejar que un personaje se apropie de las miradas.
Mirá también
Daniel Passarella aceptó la invitación de River y vuelve al Monumental contra Argentinos
Lo cierto es que River se metió solito en el quilombo. Esa es la verdad. Estará en nosotros intentar relativizar y vestir de insignificante una decisión que dividió la familia River en los últimos días. Esa es la verdad. Luego de una época signada por la unión en las buenas y en las malas, que algunas hubo, vuelve a escena un personaje que nos recuerda los peores días, situación que estaban esperando y está siendo disfrutada por nuestros enemigos.
Nos hicimos un gol en contra, parecido a la derrota de la semana pasada contra Belgrano. Tenemos que tratar de entender esto como un error sin implicancia en lo deportivo. Esperemos que toda esa energía maligna que genera este personaje no invada y contamine una escena que debiera ser un recuerdo feliz para toda la vida.
Respetemos a los grandes campeones del 78 y el 86, hagamos el homenaje a Franco Armani como corresponde y tratemos de enfocarnos en lo más importante, que es recibir con el cariño que necesita Demichelis en este enorme desafío que agarró. Tendremos enfrente un rival lo suficientemente difícil como Argentinos con su gran entrenador Gabriel Milito como para encima tener que marcar a los nuestros.
También veremos cómo responde el Monumental, en este primer tramo terminado que se verá absolutamente distinto de lo que era, con las tribunas mucho más cerca e incluso con hinchas respirando en la nuca de los bancos de suplentes. Habrá que dar un ejemplo de buen comportamiento y al mismo tiempo hacerles sentir a los rivales lo que es la gente de River.
Son demasiadas cosas todas juntas. Habrá que tener mucho templanza, concentración y paciencia. Será difícil controlar tantas emociones. Ojalá la jornada termine con una linda victoria y que determinadas presencias vayan quedando en el túnel del olvido.
No te pierdas nada
