Matheus Nunes, jugador del Manchester City, fue detendio por robar un celular en un boliche de Madrid
El mediocampista portugués fue arrestado el pasado 8 de septiembre luego de arrebatarle el teléfono a un hombre que le estaba sacando una foto.
Matheus Nunes, mediocampista portugués del Manchester City, fue detenido el pasado 8 de septiembre tras robarle el celular a un hombre que quería sacarle una foto en el baño de un boliche de Madrid.
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El hecho ocurrió mientras transcurría última fecha FIFA, donde la gran mayoría de futbolistas del club estaban convocados por sus respectivas selecciones. Nunes, que no fue citado por Roberto Martínez para representar a Portugal, aprovechó sus días libres para visitar la capital española. Durante la madrugada del domingo 8, el jugador concurrió a La Riviera, una famosa discoteca de la zona.
Aproximadamente a las 5.30 de la mañana se produjo el arresto, luego de que el volante le arrebatase el teléfono a un hombre de unos 58 años. Cuando la policía se apresentó en el lugar, el luso todavía tenía en su posesión el celular ajeno y fue trasladado a una comisaría del barrio de Arganzuela. Allí le tomaron declaración, le labraron un acta y fue liberado con cargos a la espera del juicio.
Aquel episodio no le trajo ninguna sanción por parte del club. De hecho, desde entonces jugó cuatro partidos con la camiseta del conjunto inglés y fue importante. Le anotó un gol al Watford por la Copa de la Liga y también repartió una asistencia frente al West Ham, en la victoria por 3 a 1.
El otro escándalo extrafutbolístico que tuvo que afrontar Guardiola en el Manchester City
El de Nunes no fue el único escándalo que debió manejar el entrenador español esta temporada, ya que uno los referentes del equipo, Kyle Walker tiene una polémica doble vida. En enero de este año, mientras su esposa, Annie Kilner, cursaba su cuarto embarazo, salió a la luz que el histórico lateral había tenido dos hijos con su amante, Lauryn Goodman.
Esta escandalosa situación le trajo muchos problemas extrafutbolísticos a Walker, que tuvo que mudarse a un departamento que le brindó el club, debido a que sus dos exparejas viven en las mansiones que compró en el pasado. Por otra parte, Kilner le reclama la mitad de su fortuna para "recomponer" la relación y reparar los daños emocionales. Se estima que el futbolista le tendrá que pagar aproximadamente 13.5 millones de libras.
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